El expresidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, ha sido declarado culpable este viernes de conspirar con narcotraficantes y utilizar las fuerzas militares y policiales de su país para facilitar el ingreso de cocaína a Estados Unidos.
Hernández fue arrestado en Tegucigalpa al terminar su segundo mandato en 2022 y posteriormente fue extraditado a Estados Unidos, donde fue acusado de colaborar con narcotraficantes y de recibir varios millones de dólares como sobornos, primero cumpliendo funciones de legislador y luego como presidente de Honduras.
El exgobernante ahora en prisión negó todas las acusaciones en su contra entre ellas el estar involucrado en decenas de asesinatos y de haber protegido al exlíder del cartel mexicano de Sinaloa, Joaquín "El Chapo" Guzmán, condenado a cadena perpetua en EE UU., donde su hermano Juan Antonio Hernández, también cumple cadena perpetua.
Renato Stabile, abogado defensor de Juan Orlando Hernández, dijo que las acusaciones contra su cliente "son falsas" y pidió su absolución.